Últimas noticias
En el Día Mundial de la Salud Mental resaltamos la importancia de la asistencia psicoemocional como componente esencial para el desarrollo personal y comunitario de cada individuo. La salud mental es un derecho humano universal al que deben acceder todas las personas, sin importar quiénes sean ni dónde estén.
¿Qué es la salud mental y por qué es importante?
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), salud mental es un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida y es capaz de hacer una contribución a su comunidad.
Es importante preservar la salud mental de los individuos debido ya que la misma permite a las personas hacer frente a los momentos de estrés de la vida, desarrollar todas sus habilidades, poder aprender y trabajar adecuadamente y aportar a la mejora de su entorno social.
Tal como sostiene la OMS, la salud mental es más que la mera ausencia de trastornos mentales. Cada persona puede llevar adelante un proceso de tratamiento diferente, de acuerdo a su grado de angustia y situación personal y clínica.
Si bien existen estrategias asequibles, eficaces y viables para promover, proteger y recuperar la salud mental, la brecha entre las personas que necesitan atención y las que pueden acceder a ella aún es muy amplia.
¿Por qué se conmemora el Día Mundial de la Salud Mental?
El Día Mundial de la Salud Mental se conmemora cada 10 de octubre desde 1992, es promovido por la Federación Mundial de la Salud Mental y cuenta con el respaldo de la OMS. La celebración de esta efeméride nace de un compromiso global para crear conciencia sobre los problemas de salud mental en todo el mundo y movilizar esfuerzos internacionales en apoyo de la salud mental.
¿Cuál es el alcance del Día Mundial de la Salud Mental y cómo podemos ampliarlo?
El Día Mundial de la Salud Mental se conmemora en diversos países alrededor del mundo. Sin embargo, a fin de ampliar el alcance de la efeméride, se puede trabajar desde distintos enfoques para aumentar el valor que distintas comunidades y gobiernos le otorgan a la salud mental.
Se debe trabajar a escala nacional e internacional para:
- Fortalecer una respuesta colectiva a la salud mental.
- Potenciar la concientización respecto de la misma que aumente su conocimiento y reduzca la estigmatización.
- Desarrollar políticas, planes, programas y servicios destinados a promover la salud mental.
- Reducir la carga que significan las enfermedades psíquicas.
- Prevenir las discapacidades o posibles enfermedades que se desprenden de traumas psicoemocionales.
- Desarrollar programas eficaces de rehabilitación.
Desde nuestro lugar como organización médico-humanitaria, trabajamos para integrar la salud mental en todos los proyectos médicos que desarrollamos.
Sabemos que las necesidades de salud mental son especialmente agudas en contextos de crisis humanitarias y en grupos vulnerables, y llevamos años ofreciendo servicios de calidad mediante consultas psicológicas individuales y sesiones de apoyo en grupo.
En 2022, realizamos 425.500 consultas de salud mental en las regiones donde prestamos asistencia.
¿Qué podemos hacer para cuidar la salud mental?
Para preservar la salud mental se puede recurrir a servicios que brindan una atención psicológica integral con profesionales de salud autorizados.
Es importante poder hablar sobre los traumas vividos, realizar sesiones individuales y grupales y también actividades recreativas como dibujar, cantar, bailar o realizar un deporte. Este tipo de conexiones sociales ayudan a mejorar las vidas de las personas con traumas psicológicos pues les permite conocer sus emociones, compartirlas, redirigirlas y gestionarlas.
Las personas que han sufrido y sufren miedo intenso, estrés continúo, preocupación persistente, angustia o ataques de pánico deben ser estabilizados para poder trabajar en su bienestar general. Los profesionales de salud mental pueden ayudarlos a identificar los problemas a los que se enfrentan y, posteriormente, a encontrar mecanismos de afrontamiento.
El trabajo de Médicos Sin Fronteras en salud mental
Nuestros equipos en terreno utilizan distintos enfoques creativos para ayudar a sensibilizar sobre la centralidad de la atención psicológica. Las crisis humanitarias donde prestamos asistencia pueden causar un intenso sufrimiento psicoemocional sobre las poblaciones locales; por ello, incluimos el apoyo en salud mental como parte de nuestro trabajo de emergencia.
A lo largo de este año hemos prestado nuestros servicios de salud en mental en diversos contextos:
- Tras los devastadores efectos de las inundaciones en Libia iniciamos actividades médicas en centros de atención primaria, centradas en el apoyo a la salud mental de las personas que no solo perdieron sus casas, sino también familiares y amigos. Dada la magnitud de la destrucción y la masividad de personas fallecidas, muchos de los pacientes atendidos por nuestros médicos continúan en estado de shock y muestran signos de trauma psicológico.
- Asimismo, el terremoto en Marruecos provocó la desaparición y muerte de miles de personas y dejó cientos de heridos. Ante la gravedad de la situación, enviamos equipos de emergencia al lugar para apoyar a grupos locales en primeros auxilios psicológicos y proporcionar asistencia psicológica a las personas afectadas y a los voluntarios de primera línea.
- De igual modo, nuestro personal especializado en salud mental presta asistencia a las miles de personas que huyen a Armenia tras los graves ataques que se experimentaron en Nagorno Karabaj el pasado 19 de septiembre.
La salud mental es un derecho fundamental para preservar nuestra salud y bienestar general. Continuaremos trabajando para que todas las personas puedan acceder a un trato digno de su salud psicoemocional.
Descubrí nuestro Instagram Live sobre salud mental
El 10 de octubre realizamos un Instagram Live junto a miembros de nuestra organización especializados en salud mental. La temática del evento giró en torno al impacto de la migración en la salud mental de niños, niñas y otras poblaciones vulnerables.